Cada uno hace y se toma su Camino como mejor le parece, como más le guste y como más disfrute. En mi caso, me lo tomo como un reto, como una aventura y es que mi vida, desde hace unos pocos años, va de seguir y de ver hasta dónde soy capaz de llegar. Supongo que será cosa de la edad y de la nostalgia, que también hay de eso. En realidad vivo la vida como un reto constante y la bici me ayuda, eso, y las endorfinas de las que me confieso adicto. En la segunda etapa, bajando el Puerto del Perdón (el nombre me viene al pelo), rompí el soporte de la Insta360 X3, dando una lente contra el pedregoso suelo y teniendo como consecuencia una rallada de lentes que me ha costado 150€ reparar y una chapuza de montaje para poder seguir grabando en condiciones aceptables el resto de las etapas. No soy Spielberg y a la vista está, pero le he puesto un mínimo de ganas para dejar constancia en este blog, que más que Onlybikers es Onlyjipi, de mi "penúltima" aventura; ahí va, Etapa 1: Saint Je
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